Conoce a Yeyo, el rey de las conexiones inesperadas en TikToK
Cerca de tres millones de personas siguen a este mexicano capaz de hallar relaciones entre personajes como Goku y Michael Jackson. Platicamos con este creador, quien nos revela cómo el sueño de ser Youtuber le llevó a encontrar un lugar en la plataforma del momento.
¿Qué tienen en común Elon Musk y Don Ramón? ¿Qué vínculo hay entre Porfirio Díaz y Billie Eillish? Que se lo pregunten a Yeyo, quien responde en solo 60 segundos en TikTok, donde suma casi tres millones de followers que le siguen para hallar esas inusitadas relaciones entre personajes aparentemente ajenos o también es capaz de documentar todo el recorrido para ver cómo a base de trueques una pluma se convierte en una PC para gamers.
Si se le pregunta cómo llegó a ser creador, responde sin filtros. “En la prepa me cayó el veinte que la escuela no era para mí. De 12 materias creo que estaba reprobando nueve al mes”, dice en entrevista el creador mexicano de 25 años quien, como buena parte de su generación, creció con la idea de hacer del mundo digital una forma de vida y dar vuelta a la exigencia de un camino convencional.
Intentó seguirlo con una licenciatura en producción musical y una en cine. De ambas desertó y en su lugar emprendió. Es de entenderse, pues Yeyo forma parte del 25.7% de la población que, según datos del 2019 del INEGI, tienen entre 15 y 29 años. Adolescentes y jóvenes hábiles para las nuevas tecnologías, que hablan a base de likes, shares y views y han revolucionado las profesiones. Yeyo, por ejemplo, fundó una agencia creativa a la que se sumaron otros amigos que no deseaban ejercer sus carreras. Arrancaron proyectos como un cereal truck que recorría algunas preparatorias de CDMX —en unas pocas horas al día generaban miles de pesos, cuenta— y a la par creaba contenido para clientes como OCESA. “Siempre supe que quería dedicarme a algo creativo”.
El salto a TikTok y las conexiones de millones de followers
Navegar entre algoritmos, le hizo anticipar el potencial de TikTok, que cuenta con 689 millones de usuarios activos, según DataReportal. “Creemos que va a superar a Instagram, a YouTube”, prevé el creativo mexicano. Abrió una cuenta que mantuvo casi inactiva por dos años y que retomó en medio del confinamiento. “Siempre había hecho contenido para alguien más y decidí hacer el mío”. Pero el algoritmo no estaba de buenas. “Nada pegaba. Ya me iba a rendir y dije: antes de rendirme voy a abrir otra cuenta”.
«Quiero que esa sea MI MARCA: SER EL GÜEY de
los PROYECTOS GRANDES»
Yeyo
Ahí (holayeyo) comenzó a subir vídeos más elaborados, con un guión y buena edición. Los concibió como series. Primero la del camión de cereales, la de un gato y luego sus famosas conexiones a las que llegó al explicar la teoría de los seis grados de separación, que asegura que en el mundo cada persona puede tener una conexión con otra con vínculos que no rebasan cinco intermediarios pero que le han llegado a tomar hasta cinco horas de investigación. “Para mostrar si funcionaba o no hice una conexión”, dice del video que le trajo 200 mil vistas. En tres o cuatro meses, alcanzó sus primeros mil seguidores. Crecieron cuando la gente le pedía conectar todo tipo de personajes que incluyeron a la hija de Kim Loaiza con Cristóbal Colón y hasta su propio vínculo con Tom Holland. “Se fue creando la bola de nieve y ahora es una de las series más conocidas”.
Pero pese a su crecimiento a base de esas conexiones, Yeyo prefiere una constante experimentación ante el vértigo que mueve a TikTok. “Es muy fácil que las personas te olviden”. Por eso frecuentemente prueba con distinto tipo de contenidos, desde tratar de contestar algo como la cantidad de tiendas de conveniencia que hay en el país hasta la búsqueda de expertos para remover un enjambre que hizo de la cochera de la casa familiar su colmena pasando por la serie de intercambios que comenzó con una pluma y acabó en una computadora para gamers (esta comunidad incluso ya tiene un café exclusivo) . “No me cierro a nada si me parece algo interesante y puedo contar una historia”. La única condición es que sean enormes. “Quiero que esa sea mi marca: ser el güey de los proyectos grandes”.
